Historias de Hospital
Esta es la versión
completa del saludo para los Auxiliares
de Servicio, que debería haberse entregado en el Almuerzo de Camaradería
organizado por la Dirección y por la Asociación de Funcionarios. (La fecha no tiene importancia) La ausencia de
amplificación, el notable cuchareo y la necesidad de gritar para hacerse
escuchar, permitió entregar solamente
una parte del mensaje. Aquí va completo, también para los que no
pudieron asistir ese día.
Queridos
amigos:
El conejo blanco de chaleco que
lleva a Alicia al País de las Maravillas
va apurado porque está invitado al No-cumpleaños de la reina, que se celebra
todos los días del año, menos el día de
su cumpleaños.
Esta aparente locura nos está diciendo, sin embargo, algo
maravilloso: que deberíamos celebrar
y preocuparnos de las personas todo el año, y no solamente el día de su cumpleaños. Así pasaríamos 364 días
del año preocupados por los demás y un solo día, el de nuestro cumpleaños,
dedicado solamente a nosotros:
364 días de compañerismo y uno solo de
egoísmo.
Pero no hemos podido encontrar el
camino al país de las maravillas y
estamos aquí, celebrando cumpleaños y aniversarios de la manera tradicional.
Sería interesante, por ejemplo, que esta colación que ahora compartimos,
estuviera disponible todo el año, celebrando el No-Día del Auxiliar de Servicio
y se suspendiera solamente el Día del
Auxiliar de Servicio. Esa sería la señal de que estaríamos entrando ¡por fin! al país de las maravillas.
De utopías vive el hombre, de imaginar que viviremos algún día con todos los problemas resueltos. Pero
sabemos que eso es imposible, porque si así fuera, la vida perdería todo su
sentido, que nos es otro que el de construir
nuestro propio futuro.
Y, aunque hay quienes intentan que este futuro se construya individualmente,
que vivamos en burbujas aisladas, (el "self-made-man" el "hombre-que-se-hace-a-sí-mismo" de los norteamericanos) eso no es más que
una ilusión destinada al fracaso. Ese futuro debemos construirlo juntos, no hay
otra opción. Y si vamos a trabajar juntos, tendremos que aprender a
escucharnos, a tolerarnos, a ayudarnos, a criticarnos, a polemizar, a discrepar ¿por qué nó? para encontrar las soluciones.
Asimismo, tendremos que aprender a
no discriminar a las personas, a no descalificarlas, a no encasillarlas, porque
tienen, (tenemos), la potencialidad maravillosa de aprender, de crecer, de
reconocer
errores y de enmendar rumbos. Pero,
ojo, mucho ojo, porque generalmente estas
cualidades las tenemos escondidas y hay que sacarlas afuera y
ejercitarlas día a día si no queremos vivir estancados, presos de nuestros errores y condenados a
persistir en el mismo camino, obligados solamente por la rutina o por haber
perdido la costumbre de levantar la cabeza y mirar adelante.
Queridos compañeros de trabajo,
reciban, por mi intermedio, el saludo de la Directiva de la Asociación de
Funcionarios de este Hospital, en el Día del Auxiliar de Servicio, uno más de
los estamentos de la salud, tanto o más importante que cualquier otro, sin los
cuales el hospital no podría funcionar.
Nadie nos tiene que venir a
contar que las condiciones de trabajo en
que ustedes se desempeñan son las más difíciles de todo el equipo de salud,
porque las conocemos directamente. Sabemos de sus colillas de sueldos, de sus
jornadas de trabajo, de sus terceros turnos, de sus horas extraordinarias, de
su entorno laboral.
Esas condiciones de trabajo deben
mejorar, y para eso se requiere la participación de todos, para
fijar metas, de corto, mediano y
largo plazo y, por supuesto, para trabajar por alcanzarlas y cumplirlas.
¿ Por qué va a ser imposible
conseguir la colación diaria ?
Tal vez no se logre la gratuidad,
pero puede conseguirse el pago parcial,
como en otros hospitales, o un subsidio de alimentación.
¿Por qué no podemos echar a
caminar el proyecto de un local de
atención a socios que incluya ropa
escolar, libros escolares, farmacia de muestras médicas, computador para los socios y tareas escolares por
computación para nuestros niños? Eso depende, única y exclusivamente de
nosotros, a nadie más podremos culpar si no llega a realizarse.
Pero tampoco podemos quedarnos con
la vista clavada solamente en estos problemas, y en otros más que vivimos
al interior de nuestro hospital. Tenemos
que estar atentos a los cambios de la
legislación laboral que se avecinan,
tendremos que participar en las movilizaciones, como siempre lo hemos hecho.
El fantasma del manejo flexible del recurso humano está presente, y no significa
otra cosa que inestabilidad laboral.
El Seguro de Cesantía que se discute en la actualidad, si bien es un hecho
positivo, puede estar significando un aviso:
el impacto de esa futura inestabilidad laboral que lleva a la cesantía, debe ser aminorado
con ese seguro para impedir daños
mayores a la población trabajadora.
Pero tendremos también que elegir
bien a nuestros directivos en todos sus
niveles y definir muy
bien, de acuerdo a la ley y
a los intereses
de los trabajadores, la relación que estableceremos con los niveles regional y
nacional de estas asociaciones. Porque,
ténganlo muy en claro, estas decisiones
son de los trabajadores, de los asociados, de la asamblea, de las votaciones, y
así está establecido por ley. No son atribuciones nuestras, de los
directivos, las de constituir, afiliarnos o desafiliarnos a esos niveles.
Solamente podemos ser portavoces de las decisiones de la asamblea.
Esas son tareas por realizar. No enfrentarlas significa
seguir sintiéndonos ajenos del Regional y de la Confenats, entregando nuestras cotizaciones sin tener
claridad de su destino. Tenemos esos derechos, aprendamos a utilizarlos.
Les doy una receta: el día que esta
directiva, o cualquier otra no sea de su agrado, no haya cumplido sus promesas
o no responda a sus intereses, juntan 40 firmas (el 10% de los socios) y se
autoconvocan en Asamblea Extraordinaria. En esa misma asamblea, con quórum
calificado o mediante votación secreta posterior, nos destituyen y eligen otra
directiva: Ese es el poder que ustedes tienen. Los invito a utilizarlo cuando
corresponda.
Bueno, los dejo comer tranquilos,
sin estos temas que atragantan un poco. Lo que pasa es que no puedo dejar de
pasar la oportunidad de decirle estas cosas a los que no
pillamos ni en la asamblea ni en
los pasillos.
Disfruten su día y su tarde libre,
Muchas gracias.
Dr. Hernán Eusebio Lechuga Farías